Querida
Selene:
Sobre el
enorme encargo que me has hecho… después de mucho recorrer lugares, por fin lo
tengo terminado. Sé que la espera fue mucha, pero serás recompensada, además,
yo te doy los mejores precios ¿no?
Tengo
tus esencias de ranas con arañas, la poción de amor número 75, la 74 ya no la
voy a recomendar, provoca diarrea y vómito… esta no, lo garantizo. Tengo poción
del pelo de hombre muerto… esa sí que es difícil… tiene que ser hombre de
Rumania, me la pasé desenterrando muertos de noche, fui noticia una semana (Te
mando recorte de la nota, espero le entiendas).
Ojos
egipcios van bien empacados, también los ojos de lagartija importados desde
Australia… esas brujas son unas pesadas, o eso creí hasta que vi que solo
querían de mis aguas de charco de bruja de agua… allá no hay de esas ¿Sabes?
Creo que ya tendré buenos negocios con esas también.
El
barril tiene el ungüento de belleza, es solo uno, porque solo requiere una
pasada. ¡Nada más! ¿Entiendes? ¡Solo una! Te mando sus instrucciones anexas.
El
platón de la cobra del Medio Oriente es un regalo, viene cada vez que haces la
poción del oasis del desierto y además te llevas un delineador negro… este… no
hace nada, pero tus ojos se verán místicos como las brujas de por allá.
Creo que
ese es todo el pedido, recuerda que estamos a tus órdenes, para seguir
surtiendo tu tienda.
Atte.
Yo. La
mejor proveedora mágica del mundo… ¡y te callas!
P.D. Al
siguiente pedido te mando los zombielates, me llegó demasiado tarde tu nuevo
pedido. ¿Qué los regalas? ¿Por qué se te acabaron?
Besitos
desde Rusia
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